London...London

Aprovechando los viajes baratos, yo también quise ser una de los miles de españoles que "son viajados"
Asi que me saque un boleto y allí me fuí con el diccionario en la mano y mucha ilusión.
Bueno para empezar, en el avión el personal no hablaba ni una palabra en español, desde cabina hablaban una y otra vez y yo sin entender ni papa(solo hablaban inglés) , lo único que me quedaba era mirar la cara de los viajeros ingleses y así saber si las noticias eran alarmantes o no, pues podían estar diciendo que los que tuvieramos lápiz escribieramos una nota de despedida, porque nos ibamos a pique, que yo tan feliz.
Llego a Londres, y allí en el aeropuerto nadie, hablaba español. Así que como pude salí de allí y cogí un autobús(que como buena previsora llevaba anotado) le dije al conductor que tenía que bajar en determinado sitio, el me miró y me dijo:inglish! cagom.. na tua nai..., pensé.
Entonces le mostré el papelito, con la dirección, el puso la boca en forma de u invertida, se encogió de hombros y asintió con la cabeza.
Yo feliz, me puse a mirar por la ventanilla y a hacer fotos. Unos golpes fuertes me sacaron de mi éxtasis, y el grito del conductor "finish" eh! no me avisó! ¿donde estoy? el hombre me miró y repitió "inglishhh" merda! que hacía ahora.
en eso pasa otro autobus y el otro conductor le grita " no te olvides, que hoy es la revancha"
"vale" contestó mi conductor inglés. Fué tanta mi indignación, que a pesar , que no suelo levantar la voz, le grite eh! tu!! ¿conque no hablas español? ¿he? ¿que pasa tienes verguenza de tu patria, de tu lengua? quien desprecia a su pais , desprecia a su madre, a sus raíces.
El hombre se puso rojo, pasó al lacre y de allí al lila, miré a mi alrededor y un gran grupo de estudiantes, con sus profesores se había detenido allí a mirar. Los chavales como movidos por un resorte gritaron ¡¡fiesta!! saltaron al autobús, y empezaron a hacer palmas y a zapatear mientras gritaban ¡¡ole!! y ¡¡ole!!. un profe les grito: ¡vamos chavales que el inglé, capá que yama la poli"
los chicos saltaron del autobús y siguieron su camino, entre risas, miré al hombre estaba frente a mi, le dije: no sabes ni quien eres ni de donde eres, aquí solo eres en latino mas que conduce un autobús, asi que menos aires... de pronto una lágrima corrió por sus mejillas, " me llamo Antonio y soy de Jaén" me dijo. Bueno Antonio de Jaén ¿como llego a mi destino? "suba" me dijo.
Cuando llegué al destino me dijo:"señora, es aquí cruce la calle, gire a la derecha, allí encontrará el número" Adios, Antonio de Jaén, "gracias señora"
Antonio sé que no leeras esto pero quiero desde aquí decirte que te recuerdo a menudo, espero que tu me recuerdes y que cada vez que oigas hablar tu lengua, sientas emoción y alegría en el corazón, no te averguences de esta lengua y esta tierra tan estupenda donde naciste.